EVO TOVAR, EL HOMBRE QUE NO TUVO NIÑEZ.
-Fundador de un estilo para jugar fútbol.
Por ALFONSO HAMBURGER
Evaristo Tovar Rodríguez, siete veces seleccionado para vestir los colores de San Jacinto en el fútbol aficionado, fue precursor del marcador de punta ofensivo, tipificado en el inolvidable Chontico Herrera.
Antes de que «El Chontico» deleitara al mundo con sus gambetas cortas, ya Evo estaba en uso de buen retiro.
De apariencia frágil, de patas curvas y pelo duro, ojos achicado por desprendimiento de retina, sin una gran estatura, pero con una habilidad pasmosa para salir con en balón dominado por ambas puntas, sacando el juego desde el fondo, Evo Tovar Rodríguez , también fue envuelto por el movimiento ideológico de izquierda que se regó en el pueblo como verdolaga en playa. Al principio enarboló las banderas campesinas que recuperaron la hacienda Cataluña y después fue panadero por veinte y seis años en Cartagena.
Siendo un panadero consagrado a ese oficio, Evaristo Tovar Rodríguez, ahora de 68 años, confiesa que su verdadera vocación fue la de futbolista, perdiéndose en él un ágil marcador de punta para la selección colombiana.
Tovar es zurdo de nacimiento, pero se acomodaba mejor con la derecha.
Evo, como se le conoce ampliamente, no tuvo niñez ni proceso futbolistico. Lo suyo fue natural, porque su mamá, Carlota Rodríguez, que era del Carmen de Bolivar , y su padre, Manuel Tovar Morales, que provenía de Sucre, no les permitieron jugar de niño. Les quemaban los balones,y los sometian al patio. No los dejaban salir al sol ni jugar en la calle, al menos que fuera para hacer mandados.
La cercanía del campo de fútbol de La Bajera le abrió los sentidos para el fútbol, pues vivian en el Callejón del barrio El Siete, antes de llegar al puente de la carretera Troncal, antes de Villa Betty, hoy el centro recreaciónal Mochuelos.
De niño su labor era hacer mandados y acarrear el agua de la laguna La Bajera, donde se bañaba, y a la que ayudó a aterrar, comenzando los años 70s. Entonces si vino el fútbol, el mejor fútbol de San Jacinto, pero ya siendo un adolescente.
La muerte de su madre, que le trunca la posibilidad de terminar el bachillerato, el movimiento campesino y el aterramiento de La Bajera para convertirse en un potrero caliente para el fútbol, marcaron la vida de EVO.
Tenía 16 años ya y no había conformado un equipo de fútbol. Su madre cayó enferma. Nunca le dijeron qué enfermedad tenía. Sólo veía qué tenía una pierna inflamada y que para dormir tenían que calentarle agua y ponerle emplastes para apaciguarle el dolor.
Al morir su madre, Evo tuvo la libertad de la calle, entonces fue atrapado por el fútbol. Lo suyo fue natural. Cuando tomaba el balón por la punta, el esférico parecía atado a sus pies.como si tuviera una pita, un guante. Era un fútbol moderno. Ahora les llaman carrilero. Evo era un espectáculo. Fue seleccionado 7 veces e integró uno de los equipos más reconocidos de San Jacinto, La Estrella Roja, que dirigía el señor Alberto Carval. Y después integró La Libe.
Sus archirrival era el equipo de La Gloria, que nunca pudo con La Bajera. Exigían campo neutral, pero nada. Siempre les ganaban. Por muchos años La Bajera ha sido la cuna y cantera del fútbol de San Jacinto. Actualmente El equipo de La Bajera en categoría sub 50 lleva seis títulos seguidos.
Evo se paseó invicto con San Jacinto por muchos pueblos. Recuerda al Puyo, Dalmiro Lora, Sancocho e mico, al profesor Jiménez , la nigua, El Chanfle, Pepito Alandete, entre otros.
Dice que no fue seleccionado colombiano por falta de visión de aquella época.
Después, como tantos san jacinteros hizo parte del movimiento campesino que invadió la finca Cataluña, donde le dieron una parcela.
Dice que los dirigentes que los metieron en esa línea pronto se les vio progresar, con fincas, carro, ganado. Y después se hicieron a la economía de mercado.
A Evo le tocó irse para Cartagena, donde aprendió el arte de la panadería,con un hermano. A dicho hermano, que le dio la mano, se le apareció una mita, al montar una antena de teléfono móvil en el patio. Allí se ganó la jubilación.
Tiene 4 hijos que lo quieren y quienes se han convertido en su Colpensiones, vive en casa de una hermana, donde no le hace falta nada.